Proyecto de Fotografía creativa

Publicado el 6 de May del 2008 a las 11:10 pm.

Hace unos días entregué mi proyecto de fotografía creativa de mi clase de foto en IDEP. Aquí les presento el texto de presentación del conjunto de las 12 fotografías que componen esta colección (al final del texto haz clic en la foto para verlas (pronto subiré el video con el que presenté las 12 fotos)):

Todo tiene un principio y un final, trillado pero cierto. El año nace en Enero y muere en Diciembre. El día comienza en la penumbra continuando con la salida del sol y muere al ocaso. Ahí en las sombras, donde la luz escasea, se encuentra la tristeza, pero también el desahogo, se encuentra la perdición, pero también el reencuentro. Lejos de donde nace la luz, ahí refugiado en ese espacio donde alguna vez habitó y ahora sólo es testigo del proceso de disolución del día; ahí en occidente, el punto contrario a aquel donde la luz emana: el Oriente.

A la luz del día somos quien hoy vemos en el espejo, los buenos hijos y hermanos sin cicatrices abiertas, sonrientes y mostrando lo dichosos que somos, disfrutando de la vida bonita; esto no está mal y es tan natural, pero es sólo la mitad de quiénes somos, es sólo la mitad de lo que habitamos, de quien nos habita, de nosotros mismos.

Cuando comienza el día, llenos de expectativas estamos, algunos esperando a que su vida cambie, otros a que su vida se mantenga y otros más no lo saben, no lo piensan. Al llegar la noche, las dudas despiertan, nuestros deseos armónicos caen en el sueño, los miedos rondan por el suelo y una música suave nos dice que la luz se ha ido, la noche ha llegado, el día ha muerto. La noche nos hace volar lejos, lejos de quiénes somos. Pero ¿Qué hay entre el día y la noche?

Ese punto de inflexión donde la luz recoge su velo y deja al descubierto la oscuridad, esa transición donde la luz vuela hacia otras tierras y deja lo que había antes de su llegada: oscuridad. Justo cuando los demonios despiertan y una batalla se da paso contra nosotros.  En este trabajo no pretendo hablar de la noche, no pretendo hablar del día. En este trabajo muestro el atardecer, la recogida de la luz, vista desde Oriente hacia el Occidente donde para otros nace un nuevo Oriente. No hay que buscar debajo de las piedras a quienes nos encontramos caminando por la calle, no hay que buscar lo que no hay porque no encontraremos, pero si buscamos lo que hay, encontraremos.

El presente trabajo muestra la propuesta de producir a través de imágenes fotográficas, la vista del atardecer vista desde el Oriente, es decir, lo que nuestros ojos ven cuando vemos hacia el Occidente por la tarde, cuando la noche comienza a llegar. Si bien la fotografía es la descripción de la luz, este trabajo describirá la luz en sus últimos períodos del día sobre la superficie urbana, donde todos coexistimos.

Proyecto de Fotografía creativa

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